miércoles, 6 de febrero de 2008

Colombia, las FARC y Barcelona

Pensaba escribir sobre los carnavales de España pero Colombia pudo más. Desde hace varios meses vivo con dos colombianos (bueno ahora solo queda uno, relato contado en el post anterior). Uno de ellos dice que es de izquierda, defensor de lo que para muchos es indefendible: el gobierno de Hugo Chávez, Fidel Castro y varias revoluciones / dictaduras más. A modo de broma (imagino) me pedía un poster del presidente Gonzalo o algo alusivo al tema. Nicolás es militante del Polo Democrático Alternativo, partido opositor al gobierno de Uribe. Yo que no tengo ninguna filiación política, aunque me considero “tirada hacia la izquierda” (sin saber muy bien qué significa y lo digo porque estos conceptos y los de partidos políticos son casi inexistentes en el Perú) sentía que no tenía nada en común con Nicolás, ideológicamente hablando. Más allá de compartir algún gusto musical o alguna que otra “canción de protesta”, no llegábamos a ningún acuerdo. No sé cual sea su postura hacia las FARC, pero creo suponerla…

Jorge es todo lo contrario, se dice de derecha pero no lo parece. Tenía muchas ganas de ir a la manifestación contra las FARC pero unas clases a media mañana se lo impidieron. Está en total desacuerdo con Chávez y por ende, con toda forma de gobierno que recorte la libertad. A pesar de ser de derecha, como él mismo se ha definido, siento que tengo una forma de pensar más parecida a la suya, situación que en realidad me confunde mucho... ¿Seré yo también de derecha y habré estado equivocada creyéndome otra cosa?

Jorge y Nico trabajaban para el gobierno de Bogotá y están muy vinculados a la situación política de su país, me torturaban escuchando radio colombiana todas las mañanas, tardes y noches (el equivalente a RPP) y sin querer me enteraba del día a día colombiano.

Es curioso, hemos vivido juntos por mucho tiempo y hemos hablado de varias cosas y creo que nunca de las FARC. Pensaba ahora que veo tantas noticias, blogs y artículos sobre el tema, que la distancia geográfica debe haber influido para que me sienta alejada. Aquí, aunque también se convocó y se movilizó gente, “alrededor de un millar de personas reunidas en la plaza de Sant Jaume”, según El Periódico de Cataluña, no ha sido una cuestión de fondo (o al menos así me parece). Creo que la cercanía a las elecciones generales españolas está monopolizando los medios de comunicación. La verdad es que a pesar de la tecnología, las noticias no se pueden seguir de la misma manera y lo que es peor, no se viven de la misma forma.

Cuando Jorge me comentó de la movilización, no me sentí motivada a ir, pese a que me parece una razón suficientemente buena como para salir a las calles (o a la plaza Sant Jaume). Justo ahora estoy llevando un curso sobre Participación Política, en donde analizamos porqué los ciudadanos participan ya sea de manera convencional (en organizaciones, partidos políticos, etc) o no convencional (protestas, boicots, etc). Ahora me siento y leo investigaciones pero ya no salgo a las calles. Los carnavales habían ocupado mi mente y justo hoy que han terminado pensaba escribir sobre ellos. ¿Es que acaso me he olvidado que los peruanos conocemos muy bien la palabra terrorismo?, ¿qué sabemos de secuestros, matanzas y violaciones de derechos humanos?, ¿qué las FARC son un grupo que engendra terror y por tanto a mi no me queda duda de cómo calificarlos? Al cambiar de tema, creo que inconscientemente he tratado de reivindicar mi indiferencia.

Según el Gobierno colombiano, las FARC tienen en su poder, a más de 700 personas y están dispuestas a canjear a 44 de ellas por medio millar de guerrilleros presos, mediante un acuerdo humanitario con las autoridades. ¿Esta historia no se les hace conocida? Secuestro por canje, como si las vidas humanas fueran fichas que se intercambian. Algunos sostienen que las movilizaciones en general (y esta en particular) no sirven para derrocar un régimen o poner fin a acciones terroristas y efectivamente es cierto, sin embargo, permiten a los ciudadanos de a pie levantar su voz, mostrar su inconformidad y ser agentes activos. Confluyen muchos factores a la hora de cambiar el rumbo de la historia, las movilizaciones son solo una pieza más, ahí radica su importancia.

5 comentarios:

Jose dijo...

Luego de los años de terror y conflicto interno que tuvo el Perú, creo que ningun peruano (o al menos la mayoria) dudaría en calificar a las Farc como un grupo terroristas, porque eso es lo que son TERRORISTAS. Ver el apoyo de Chavéz a este grupo debería hacernos reflexionar sobre el camino al que esta llevando a Venezuela. Es lamentable que el populismo de Chavéz y sus petrodólares le aseguron el poder a este patán. El Perú tiene una aparente estabilidad, sin embargo en varias zonas del interior el mensaje de Chavéz esta esparciendose como un virus, y eso junto con el fenómeno Humala, deberia llamarnos a una muy ardua reflexión.

Jose dijo...

Tengo un blog, recien comienzo asi que esta monce.

http://et-nerarios.blogspot.com/

karinam dijo...

Bueno, la verdad es que sobre las FARC y en especial sobre esta manifestación han habido muchas posturas... desde nuestra forma de ver el mundo y desde nuestra experiencia pues nos suenan a terroristas... y siento una vez más que Latinoamérica tiene más cosas en común de las que habitualmente nos damos cuenta.

PD. Te felicito por el blog!! Esta muy paja!!! Ojala postees seguido... la tarea más difícil!! Suerte!

Anónimo dijo...

Leo y veo que hace rato dejaron de ser niños y espero que por el bien de nuestro país y america sigan estando atentos y teniendo a través de sus reflexiones apoyo de muchos jovenes como Uds. de no permitir denuevo mas terrorismo y que en en nobre de la justicia se haga mas injusticia en nuestra latino america.

Besos

Mapies

Elecciones 2010 dijo...

Excelente artículo, hace poco leí un post relacionado con este tema en un portal colombiano sobre las elecciones 2010 en Colombia, está página también trata todo sobre candidatos, encuestas y todo lo relacionado con las elecciones de 2010.