Descubrí a Marta Gómez hace algunos años y desde que la escucho, siempre vuelvo a ella. He sentido sus canciones precisas, exactas, en muchos momentos de mi vida.
Hace poco me volvió a pasar y me detuve sobre una en especial, una que le dedica a su abuelito. Ande con mañita almita mía, que para nosotros sería algo así como “ande con cuidado”. Pensé inmediatamente en mis abuelitas y en todo lo que me han cuidado y se han preocupado por mí; en lo importante que es tener gente que te quiera, que te proteja y que piense en ti. Pensaba además en como estas experiencias nos marcan y trascienden a la vida misma. Hay momentos en los que uno tiene más presente a sus ausentes, ya sea por fechas especiales, situaciones cotidianas o excepcionales. Es justo lo que me está pasando en estos largos y maravillosos meses.
Desde hace 3 meses me enteré que voy a ser madre. Ha sido una noticia que me ha suscitado diversas emociones y sentimientos y que me tiene en un estado de ensoñación. Es sumamente impresionante como en un segundo nuestra vida puede cambiar y una noticia así, remover nuestras entrañas (literalmente). Los cambios físicos, si bien son importantes y notorios, son solo una pequeña parte de todo lo que implica este asombroso proceso de volverse madre.
Dentro de todo lo que pienso, siento y sueño, mis imágenes de madre se van haciendo más presentes y van cobrando más sentido. Esto ha coincidido con el primer aniversario de la muerte de mi abuelita paterna y con el recuerdo del cumpleaños de mi abuelita materna. El tenerlas tan presentes, ha hecho que sienta a mi hijito no solo como un regalo de Dios, sino también como un regalo enviado por ellas. Un regalo en donde la vida le sigue a la muerte, en donde unos ciclos terminan y otros inician. Mis padres ahora serán abuelos y yo madre. Ya no hay quien de manera tierna, como solo los abuelos pueden ser, me cuiden y me digan “derechito a su casa”, ahora soy yo quien tendré que cuidar, proteger, querer y mimar a este nuevo bebé que llegará a iluminar mi vida y mi nueva familia.
Canción para querer y ser querido – Marta Gómez “Almita mía”
“Ande con mañita almita mía
No vaya a ser que me la aporreen por ahí
Ande con cuidao’ corazón mío
No vaya a ser que tanto amor
Me le haga daño corazón”